Resumen y
principales conclusiones
¿Por qué todo el mundo va a comprar a Pamplona
si aquí se producen tantas cosas buenas? ¿Por qué es tan difícil encontrar en
la tienda del pueblo aquello que se está produciendo en mi valle, o en el valle
de al lado? Con todo el potencial que tenemos, ¿cómo es que la gente no tiene
trabajo y se marcha?
En los últimos años, algunas personas de la
zona oriental de Navarra han estado haciéndose estas preguntas, y tratando de
buscarles solución. Con esta finalidad nacen los proyectos “¿Qué se come aquí?”
(centrado en la comarca del Pirineo) y “Tejiendo la despensa, modelo de
Gobernanza alimentaria Territorializada, Merindad de Sangüesa”, centrado en la
demarcación histórica de la Merindad de Sangüesa (que incluye las comarcas de
Pirineo, Prepirineo y Sangüesa), con un total de 57 municipios. Esta Merindad,
a la que nos referiremos durante el resto de este documento, abarca una gran diversidad
territorial en términos de orografía, clima, demografía y economía, lo cual
supone una ventaja desde el punto de vista agronómico – más variedad de
productos – pero un desafío en otros aspectos, como veremos más adelante.
El objetivo de ambos proyectos es conocer el
sector agroalimentario de esta zona para identificar las posibles
colaboraciones entre unos y otros, y así avanzar hacia un sistema alimentario
(desde la producción hasta el consumo) que permita aprovechar al máximo los
recursos de la zona por parte de la gente que vive en ella. Que haga que la
riqueza generada se quede en el propio territorio para así favorecer que su
población pueda seguir arraigada en él y no necesite marcharse a otros lugares.
Ambos proyectos prestarán mucha atención a la toma de decisiones, de forma que
las políticas locales puedan construirse colaborativamente por parte de las
personas que van a vivir con ellas. A esta toma de decisiones es a lo que se
llama “buena gobernanza”.
El proyecto “¿Qué se come aquí?”, referente al
Pirineo, ha sido promovido por los Excmos. Aytos. de Esparza de
Salazar/Espartza Zaraitzu y de Burgui/Burgi, y recoge una descripción de la
cadena alimentaria y de otros agentes relacionados con el sistema alimentario,
complementado con entrevistas (lo que hemos denominado un “Diagnóstico
Operativo”).
El proyecto “Tejiendo la Despensa”, que abarca
toda la Merindad, está impulsado por Cederna Garalur en colaboración con la
Mancomunidad RSU de Irati, Mancomunidad de Sangüesa, Mancomunidad de SS de
Auñamendi, Mancomunidad RSU Ezka Salazar, las Juntas de Valle de Roncal y
Aezkoa, veinte ayuntamientos ubicados en el territorio y la Asociación Arterra
Bizimodu. “Tejiendo la despensa” se compondrá de varias fases. Una primera fase
de Diagnóstico Operativo, que parte del realizado en el Pirineo y lo amplía, es
la primera de ellas, y que ha sido realizado por el equipo técnico de la
Fundación Entretantos, con el apoyo del equipo de Cederna Garalur. Y una
segunda fase de ejecución de acciones a partir de los resultados del
diagnóstico, así como de definición de espacios de gobernanza (coordinación y
toma de decisiones) que permitan hacer un seguimiento y acompañamiento de las
acciones se desarrollen según lo que dispongan las personas que habitan en la Merindad.
¿Cómo se ha
realizado el Diagnóstico Operativo?
La Merindad de Sangüesa
comprende, como ya hemos dicho, las comarcas de Pirineo, Prepirineo y Sangüesa.
Estas zonas son muy diferentes entre sí, tanto a nivel productivo como social.
Esto tiene implicaciones a la hora de plantear acciones conjuntas, y también a
la hora de tomar decisiones – ya que, por ejemplo, no existe una población
“central” que sirva como referencia a todas las zonas.
Para realizar el Diagnóstico Operativo se comenzó
con la recopilación de información documental (estadísticas oficiales, informes
temáticos realizados en el pasado, planes estratégicos, etc). A raíz de esta
revisión bibliográfica se entrevistó a personas representantes de entidades
locales relacionadas con el sistema alimentario. En este caso, se ha tratado de
equilibrar la necesidad de entrevistar a personas con distintos roles en la
cadena alimentaria con la necesidad de representar las tres zonas geográficas
de la Merindad, y con la particular situación sanitaria generada a raíz de la
COVID-19 (que ha dificultado, por ejemplo, la realización presencial de algunas
entrevistas).
Una vez recopilada toda esta información se
redactó el Diagnóstico Operativo, que incluye:
● Un análisis vertical,
que describe la cadena agroalimentaria según sus distintas fases: producción,
transformación, distribución, comercialización y consumo
● Un análisis
horizontal, que describe todos aquellos elementos que tienen que ver con el
sistema alimentario, algunos de los cuales no están directamente implicados en
la cadena agroalimentaria (por ejemplo, aquello que tiene que ver con las
Administraciones y servicios públicos, con las organizaciones sociales, etc..
El análisis horizontal incluye algunas herramientas que permiten visualizar
mejor la información: un mapa de actores, que relaciona a los distintos agentes
identificados; una línea del tiempo, para visualizar los hitos más importantes
de los últimos años; y un mapa de recursos, que permite visualizar aquello que
ya existe en el territorio y que puede utilizarse como punto de partida o
complemento desde el que impulsar acciones concretas.
El diagnóstico realizado ofrece, a su vez, los
siguientes elementos que servirán para la priorización de acciones a
desarrollar:
● Un análisis DAFO (Debilidades,
Amenazas, Fortalezas y Oportunidades) para el impulso de transiciones hacia un
sistema alimentario local más sostenible y vital.
● Un mapa de
problemáticas, que las relaciona entre sí para identificar dónde conviene más
poner las fuerzas colectivas de las gentes locales.
● Una serie de recomendaciones,
basadas en todo lo anterior, sobre cuáles pueden ser las actuaciones más
convenientes con las que empezar.
Con las conclusiones del Diagnóstico Operativo
(que se resumen en el siguiente apartado) se realizaron, en marzo de 2021,
distintas presentaciones y talleres participativos en 6 pueblos de las comarcas
representadas, así como dos reuniones iniciales de lo que sería el germen del
Grupo Motor. Esto permitió definir prioridades concretas sobre las que empezar
a trabajar y establecer un esquema de gobernanza para ello.
Principales
resultados del Diagnóstico Operativo
Resultados del Análisis Vertical:
● Existe un número
significativo de agentes (entidades, empresas y colectivos) en los distintos
eslabones de la cadena alimentaria en el territorio de la Merindad de Sangüesa
(producción, distribución, comercio…), suficiente como para empezar a trabajar.
Estos agentes comparten una serie de
características deseables (pequeño tamaño, arraigo en el territorio, deseos
compartidos respecto a cómo debería ser un Sistema Alimentario
Territorializado)
● Sin embargo, estos
agentes se encuentran aislados entre sí: existe muy poca articulación tanto
dentro de cada nivel (por ejemplo, los productores con los productores o los
comerciantes con los comerciantes) como entre unos niveles y otros (por
ejemplo, entre productores y comerciantes, o productores y hosteleros).
● A su vez, se han
detectado determinadas carencias en cuanto a presencia de infraestructuras para
la elaboración y distribución de alimentos, así como para la incorporación de
jóvenes a la actividad agraria.
● Por tanto, la
recomendación principal consistiría en comenzar a actuar por la articulación de
estos eslabones, internamente y entre sí.
Resultados del Análisis Horizontal:
● Existen numerosos
agentes que comparten una visión común de cómo podría ser un Sistema
Alimentario Territorializado
● Existen espacios de
gobernanza en los que hay espacio para trabajar en los temas agroalimentarios,
aunque no abarcan exactamente a todo el territorio de Merindad de Sangüesa, y
no existe articulación entre los espacios de gobernanza de las distintas
comarcas incluidas.
● Se han realizado
numerosos estudios y diagnósticos de la zona, que abarcan diferentes
perspectivas. Los resultados de estos estudios no siempre están disponibles
para el público. Existe un cierto cansancio ante el “sobrediagnóstico” y
demanda de un mayor esfuerzo en realizar acciones que mejoren la vida de las
gentes locales.
● Por tanto, la
recomendación principal consistiría en utilizar la información ya existente y
recogida para poner en marcha acciones concretas y capaces de otorgar
resultados rápidos, que refuercen la sensación de empoderamiento de la
población y permitan visualizar un cambio efectivo y útil en el sistema
alimentario en plazos no muy largos.
Resultados de los
seis talleres de presentación y debate del Diagnóstico Operativo:
Las conclusiones del Diagnóstico Operativo se
presentaron a la población local en seis talleres participativos, celebrados en
marzo de 2021 en distintas localidades de la Merindad de Sangüesa: Aoiz/Agoitz;
Aibar/Oibar; Roncal/Erronkari; Ezcároz/Ezkaroze; Aribe/Arive; y
Burguete/Auritz. A estos talleres se invitó al público en general, sin ser
necesaria una vinculación previa con el proyecto ni una formación o compromiso
específicos, y especialmente a administraciones locales y entidades sociales y
empresariales del territorio. Los seis talleres se centraron en priorizar las
problemáticas más importantes de entre aquellas identificadas en el
Diagnóstico. Las problemáticas identificadas como prioritarias respecto a los
objetivos del proyecto resultaron ser las siguientes:
● Falta de articulación
dentro de cada uno de los sectores de la cadena alimentaria, y entre los
distintos sectores
● Marketing deficiente
del producto local
● Despoblación y
envejecimiento crecientes
● Falta de formación en
emprendimiento social adaptada al contexto local
● Falta de
sensibilización sobre el valor del producto local
Estas problemáticas
priorizadas se utilizaron como base para los debates del Grupo Motor.
Resultados de las
reuniones del Grupo Motor:
De forma paralela a los seis talleres de
presentación del Diagnóstico Operativo se realizaron también dos reuniones más
largas con el germen de lo que se pretendía que fuera el Grupo Motor, esto es:
un grupo de personas capaces de aportar visión estratégica al proyecto, con un
cierto compromiso en el tiempo para impulsar el proyecto y la participación de
la población local en el mismo.
En estas reuniones del Grupo Motor se
pretendía:
● Conformar un grupo de
personas que puedan mantener un cierto compromiso con el proyecto, acudan a las
reuniones, se mantengan informadas y aporten su conocimiento. Otorgar un
espacio para que estas personas puedan conocerse entre sí y comenzar a trabajar
juntas.
● Aportar una formación
básica sobre qué son los Sistemas Alimentarios Territorializados, así como
ejemplos de proyectos de este tipo que se han llevado a cabo en otros lugares
● Definir la forma de
funcionar en adelante dentro del proyecto, en cuanto a las estructuras de
gobernanza (cómo van a tomarse las decisiones) del mismo
● Transformar las
problemáticas priorizadas en los talleres de presentación del Diagnóstico en un
listado de acciones concretas en las que comenzar a trabajar
El esquema de gobernanza acordado en estas
reuniones, que puede consultarse con más detalle en el Documento de diagnóstico
operativo (versión marzo 2021) incluye:
● Grupo motor
● Grupos de trabajo
● Equipo técnico
● Comisión de seguimiento
Dado que no existe la misma capacidad para
ejercer un cambio significativo a corto-medio plazo en todas estas
problemáticas, se decidió que no todas se abordarían directamente desde el
Grupo motor y los Grupos de trabajo, sino que algunas se pueden desviar a otras
instancias ajenas al proyecto.
Se han marcado en
negrita aquellas propuestas susceptibles de ser llevadas a cabo en el seno del
presente proyecto, aunque la consolidación definitiva de estos grupos de
trabajo se ha pospuesto a la próxima reunión del Grupo Motor.
Algunas de estas
acciones ya se encontraban propuestas en la descripción inicial del proyecto
“Tejiendo la despensa” (como los encuentros profesionales), y otras están en
marcha desde entidades implicadas en este proyecto, que estarían dispuestas a
adaptarlas a las demandas del proyecto (como el caso de las necesidades
formativas). Para otras se ha solicitado financiación adicional (como la
feria/mercado), o se plantea solicitar
financiación adicional (para el catálogo de
oferta de producto local). No obstante, se han planteado como abiertas a
modificaciones.
A su vez, se acordó poner en marcha los
siguientes Grupos de Trabajo:
● GT1- Poner en marcha
uno o varios mercados/ferias de productores, de forma que permita su
convergencia en la Merindad Sangüesa. Conformado por personas del sector
primario. ● GT2- Diferenciar al
pequeño comercio y la hostelería locales en base al producto local, de forma
que permita su convergencia en la Merindad Sangüesa. Conformado por empresas de
hostelería y comercio alimentario.
● GT3- Mejorar la
autoestima, el orgullo y el valor social conferido al oficio de agricultor/a y
ganadero/a en el territorio. Compuesto por representantes de entidades de todo
tipo.
Una vez realizada esta priorización:
● Se emplazó al Grupo
Motor a otra reunión, preferiblemente presencial, en los próximos meses (fecha
a definir según la disponibilidad del equipo técnico de apoyo de la Fundación
Entretantos), en la que decidir definitivamente los objetivos de los Grupos de
Trabajo.
● El Grupo Motor
desarrollaría un debate para aportar ideas acerca de cómo desarrollar una
identidad compartida en todo el territorio.
● Se definió una serie de
agentes con los que ponerse en contacto para tratar de incorporarlos al Grupo
Motor
● Se decidió que se
comenzaría la búsqueda de recursos para la contratación de una persona que
pueda dinamizar la implementación de las acciones del proyecto Tejiendo la
Despensa
● La asistencia técnica
del proyecto (Fundación Entretantos) trabajará junto con INTIA y Cederna
Garalur para adaptar los recursos formativos presentes en el territorio a las
necesidades surgidas del proyecto
Conclusiones
La Merindad de Sangüesa presenta un potencial
significativo de territorialización del Sistema Alimentario. Existen distintos
actores con intereses comunes y una visión compartida de cómo quieren que sea
el territorio en el que viven, y existen recursos para materializar esta
visión.
Sin embargo, resulta necesario poner en
contacto a estos actores entre sí y comenzar a trabajar en acciones comunes
concretas. Para esto, se han priorizado las problemáticas identificadas en el
territorio y se ha dispuesto un sistema de toma de decisiones y acción con el
que empezar a trabajar. El mayor peso de esta toma de decisiones se encuentra
en el llamado Grupo Motor.
Se espera que en los
próximos meses este Grupo Motor vuelva a reunirse para decidir definitivamente
las acciones que se llevarán a cabo, y se anima a quienes aún no hayan entrado
en contacto con el proceso a que se incorporen a él.